La madeja de hilo rojo que une madre e hija- del libro «Relatos del cántaro»

Linaje Femenino - Linares, Región del Maule

Este texto es parte de los cuentos del mi primer libro RELATOS DEL CÁNTARO

Lee aquí versión en portugués


Había llegado el anhelado día en que la niña había dado paso a la mujer sabia, pues la sangre de sus venas había comenzado a entretejerse en su útero.

La madre emocionada la bendice, pintando su rostro con tintes que ha preparado con fibras de vegetal y tierra en un cuenco de madera. Besa su frente y una lágrima brota de su ojo izquierdo. Esa también es la lágrima de todas sus abuelas, que se hacían presentes a través de esa gota ancestral.

Con delicadeza la madre, dibuja símbolos sagrados en el rostro de su hija, y luego le trenza el cabello, adornándolo con minúsculas flores blancas y rojas en señal de celebración y regocijo.

Luego, toma un cofre que mantenía escondido entre sus tesoros más íntimos, éste contenía joyas preciosas y una pequeña madeja ovillada especialmente para la niña. Estaba teñida con sangre menstrual, específicamente, con aquella que salió en su primera menstruación 40 días después de dar a luz a su hija.

En ese especial día, la madre pide a la niña desenrollar simbólicamente esta madeja hasta el fin de los tiempos, para que así, generación tras generación, cada madre le enseñe a sus hijas e hijos, que la menstruación representa la unión sagrada que existe a lo largo de los linajes, siendo un vínculo que se mantiene de forma ininterrumpida, útero a útero. Pues el hilo rojo simboliza los lazos sanguíneos que nos unen y que son inconmovibles a lo largo de las generaciones. Transmitiendo por medio del hilo, el valor y la responsabilidad con todo el linaje anterior y posterior, además de la fidelidad a sí misma y la necesidad imperiosa de liberarse de lo que  pesa o esclaviza, para llegar a encarnar la propia autenticidad.

Luego, en un momento de profunda cercanía, la madre toma las manos de su hija y mirándola a los ojos le dice:

-El hilo de este ovillo representa tu alma uterina. Todo lo que vivas se registrará en el hilo rojo, a éste nada le podemos ocultar, pues su misión es mantener viva la memoria para que ésta sea honrada. Tu vida será parte del legado de todo el linaje, todo lo que sufras es parte de la memoria de dolor del hilo y por lo tanto será aquello que has repetido y de lo que tendrás que honrar y liberarte, todas las deudas que no saldes las pagarán tus sucesoras. Vive fiel a ti misma ante todo y camina por el sendero que mantenga tu fuego encendido. Ten siempre consciencia de que estás creando memorias, ya eres la ancestra de siete generaciones sucesoras-.

Sin comprender por entero las palabras de su madre, la niña tomó con agradecimiento la madeja entre sus manos, la puso cerca de su corazón y miró al horizonte donde un cielo arrebolado celebraba el rojo de su útero. Sus ojos estaban brillosos de emoción ya que por primera vez se sentía infinita. Había comprendido algo muy profundo: más allá de la vida o la muerte, el hilo rojo la mantendría siempre unida a los vientres de su linaje. A través de las memorias de los úteros, ella estaría viva en todas las que vendrían después, ya que en la sangre menstrual de sus sucesoras, ella se haría presente. De esa forma, ya se sentía ancestra de todas las futuras generaciones, por ahora sólo vivas desde las estrellas.

En el momento en que la niña aceptó con amor esta madeja y comprendió su sentido, la madre sintió que una parte muy importante de su labor materna estaba completa, experimentando un gran regocijo en su corazón. Respiró y agradeció al gran espíritu haber vivido ese momento sublime.

La niña se dispuso a caminar en solitario por el desierto rojo, entonando un canto de agradecimiento a sus ancestros y a la vida. Cantó hasta que el sol se escondió por completo.


Hay una telaraña, que une a todas las mujeres del mundo, de ella nacen millones de hilos rojos que unen linealmente a cada mujer con su anterior y posterior linaje.

Este hilo pasa por los úteros de las mujeres y se tiñe del rojo rubí de la sangre menstrual que remoja sus úteros por dentro, así también salen hilos dorados que mantienen a los hombres arraigados a la red a través de los úteros de las mujeres.

Si juntamos todos los hilos rojos del mundo nos veríamos como una gran telaraña roja que es la humanidad.

Este hilo lleva y trae información, está tejido a través de las finas fibras de ADN, jamás se corta, sólo se anuda a causa del dolor y  los conflictos, y en ello es necesario ir desatando nudos para ir sanando.

Cuando una integrante reniega a sus ancestras, o se siente excluida de su hilo rojo, se forma un nudo por lo que el cordón deja de nutrirla, y ésta puede enfermar o deprimir sintiéndose incompleta.

Cuando una mujer honra su hilo rojo, recibe y envía todas las bendiciones del árbol, por lo que estas fluyen de aquí para allá.

Sostener el hilo rojo con fuerza, es como decirse a sí misma: “Este es mi linaje y de aquí vengo yo, recibo todo de mi árbol, lo bueno y lo difícil, y lo acepto con amor”.

A medida que cada integrante del árbol va sanando (hombres y mujeres), el hilo rojo evoluciona en su color y va adquiriendo un brillo resplandeciente que se irradia sobre el resto de la red.

¿Ahora comprendes por qué somos uno?

Si sanas tú, sana tu árbol, si sana tu árbol se eleva la consciencia de la humanidad, por lo que es de suma importancia recuperar la consciencia del hilo rojo que nos une a todos y todas.

Es muy importante que de madre a hija se recupere la tradición ritual que celebra a la niña cuando se hace mujer. Así cada niña podrá recibir una tradición que se va manteniendo viva de útero a útero, y tendrá consciencia de que su menstruación simboliza la unión a linaje matrilineal y así también es la posibilidad de traer a la tierra una nueva vida.

Esta tradición consiste en conmemorar el instante en que la niña se hace parte de éste hilo rojo, y ese momento es cuando llega su menstruación. Celebrar la menstruación es celebrar la unión matrilineal.

Cuando veas en tus bombachas la primera mancha de sangre es que ha llegado el momento de que recibas la madeja de hilo rojo, la cuides como un preciado tesoro y la conserves para que  luego de algunos años la entregues a tus hijas. 

La madeja de hilo rojo es una metáfora que simboliza la unión sanguínea que existe en nuestro linaje matrilineal, mantener viva esta unión es celebrar los ciclos de la vida, hablar, reunirnos y transmitir información valiosa sobre el ser mujer de madre a hija, abuela a nieta, tía a sobrina.


El hilo Rojo de nuestro ciclo menstrual nos une a todas las mujeres: nuestra madre, abuelas, bisabuelas y todas las mujeres de nuestra línea ancestral, hasta el pasado más remoto en las brumas del tiempo.

Tú y todas tus antepasadas maternas han sangrado cada mes para poder dar vida. Reconoce que sin la menstruación ninguna hubiese podido dar luz. Eres un eslabón de una cadena de generaciones que comenzó antes del tiempo y continuará hasta mucho después de que te hayas ido.

Todas las mujeres estamos unidas a través de la conexión profunda y visceral de los tiempos de luna. Por De Anna L’Am CREADORA CARPAS ROJAS


Te abrazo con amor

Por Ximena Noemí Ávila Hernández

 

80 comentarios en «La madeja de hilo rojo que une madre e hija- del libro «Relatos del cántaro»»

  1. Bellisima historia!!! Y ojalá como dices al final, algún dia podamos danzar juntas enredadas en ese hilo rojo que nos hermana…Gracia!! Gracias… cuánto por «recordar» y poner en movimiento…

  2. Que hermoso Ximena. He recorrido un largo camino hasta re-conectar con mi linaje, y ese hilo rojo me acompaña siempre en la muñeca para recordarme, de donde vengo.
    Me encantaría conocer esas danzas, y como puedo aprenderlas y compartirlas. Muchas gracias x todo lo compartido. Bendiciones para nuestros hilos rojos.

  3. Gracias, Gracias. Gracias…tomo la responsabilidad con alegria y amor…para la sanacion de un colectivo consciente generacional…mi hermosa hija KYARA continuara el legado…tomo el hilo rojo con fuerza y amor…por la PAZ.

  4. Hola , me encanta tu pagina, pero te go unA pregunta, el hilo rojo es simbolico o literA¿ por desir yo soy la 3a generacion de mi arbol , que puedo hacer aparte de honrar mi arbol, aparte de la oracion que tu recomiendas. Algun rito para romper las cadenas. Sufro mucho en mi periodo menstrual

  5. Hola Ximena, estoy encantada de leer y aprender cada día de los relatos. es un camino fascinante y sanador. Gracias, gracias, gracias. que lindo seria hacer un encuentro de Mujeres acá en Colombia (CALi- Valle del Cauca).

  6. Ximena buenos días rogarte me orientes, soy una mujer de 53 años, recien he dado gracias al hilo rojo que se extinguido en mi cuerpo aquí que sigue??? Mi vida sexual siempre fue complicada, mi maternidad con temores, necesito sanar y ayudar a mi árbol a que lo haga que puedo hacer?? Por tu atención mil gracias y Dios te bendiga!!!

    1. Qué apasionante.leer y descubrir ésta historias .del hilo rojo . con que sabiduria transmite.del hilo rojos que es un simbolo que refiere al ADN. Ay!! Transmite vida
      Me encanta queiro más de este alimento. Gracias Ximena

  7. Querida Ximena, no te conozco y aún así siento una gratitud y amor infinito para tí y los tuyos que plasmas a través de la tinta y el papel. Navejando por el internet, mi niña inquieta en busca de mayor sabiduría me trajo a tu texto, que como anillo al dedo me reconforta y me dice que voy en el camino que me toca a mí.
    Tengo una página en facebook, que se llama Maternidad Consciente que ha nacido para mí, como un eco que resuena en los corazones de más mujeres que quizás también reciban los mensajes a través de cosas que me retumban a mí. Me he tomado la libertad de copiar tu cuento (obviamente citándote y la página). Porque esta sabiduría ancestral debe ser compartida, lanzada al viento para que llegue cada vez más y más a la ciencia universal femenina. Te honro y admiro. Gracias infinitas.

    Mariana.

  8. Gracias Cantaro Sagrado, haz hecho «sangrar» mi corazon uterino de alegria. «Escuchar» estas palabras de magia divina me hacen sentir de nuevo mujer, mas centrada, concentrada y decidida a hacer de este pasaje doloroso-ausente, una cadena-red nueva, que teja desde mi un nuevo, hermoso y mas consciente historial de vida. Gracias!! Bonitos Viajes de Sangre 😉 🙂

  9. Muy bello….y yo sentí sl leerlo que tambien estoy conectada con mi hilo rojo…..es mas al leer pense ….siempre supe esto….bendiciones y muuuuchas gracias….me emociono

  10. Me encanta cada publicación en este bello espacio… oooh… porqué no supe todas estas cosas cuando fui joven ? Ahora ya no sangro más y siento q’ mi cuerpo desea sanar tanto aún… en fin, sólo siento Gratitud por deleitarme con tanta sabiduría en c/ publicación. *☆*

  11. Hola. Muchas gracias por tu cuento. Ultimamente he recibido información para sanar el utero y eso me hace muy feliz. Al leer el cuento me acorde cuando me llego la primera menstruación y mi mami me hizo caras de tristeza como se me crecio la niña. Y luego me vino a la mente cuando hace unos años cuando empece a sembrar la luna y le conte a mi mami que estaba sembrando la luna y que me habian contado sobre unos trapitos y mi mami toda linda me saco los pañales de tela de cuando era bebé que habia bordado mi abuelita y me los dio para que hiciera los trapitos para la luna. Y le agradezco a la madre tierra porque queria aprender mas sobre la luna. Y gracias a amigas me han llegado los cuentos. Gracias por compartir esta historia y bendiciones

  12. Gracias, y bendiciones por compartir esta enseñanza.
    No tuve la oportunidad de tener la confianza con mi madre (fallecia actualmente. cuando llego mi primera menstruacion). Por lo tanto no vivi el verdadero sentido de lo que lo bello que significa, si no hasta ahora.
    Siempre lo vi con algo incomodo
    Y malo pero aceptandolo. Y que ahora adulta lo bendigo, por que me dio la oportunidad de procrear a mi bella hija.
    Quiero seguir instruyendome por que quiero dejar el legado a ella de que es una hermosa etapa y con un profundo sentido de la vida.
    El ritual sera una buena idea para celebrar esta hermosa etapa, para aceptarla y reconocerla como tal. Etapa que pronto se ve venir.

  13. Gracias por este bálsamo… «Este es mi linaje; y de aquí vengo yo; recibo todo de mi árbol; lo bueno y lo dificil y lo acepto con amor» bellísimas palabras; sólo el amor trasciende las dificultades. Bendiciones y gracias por compartirlo.

  14. Hola Ximena! Me encanto tu cuento pero hay algo qe no entendí bién. Cuando tengas tiempo, talvez puedas responderme… La madeja la hace una cdo se convierte en madre y se la da a su hija? Y luego la hija cuando se convierte en madre hace una madeja nueva y se la da a su hija? Es asi ? O es una sola madeja qe se pasa de generacion en generacion? Y si tiene mas de una hija? Hace varias madejas? Gracias,

    MARCE

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